Sí. Ya viene el frío polar y lo estamos notando. Y yo a la mínima que oigo que en las montañas nuevas me pongo a pensar en cuándo será mi primer fin de semana de esquí de la temporada. No puedo remediarlo. Lo adoro... notar el viento en mi cara cuando me deslizo por las pistas, sentirme así de fresca y libre, eso no me lo da ningún otro deporte. Para mí, más que un deporte es un placer. Pero la lástima es que es caro, por lo que hay que buscar las mejores ofertas tanto de viajes organizados como de ropa. ¡Porque la moda también es algo clave en el esquí! No podemos gastarnos una pasta yendo a la nieve para ponernos con aquél mono viejo que nos ha prestado el hermano del vecino de la abuela y que además de venirnos tres tallas más grande es absolutamente horrendo. No, ya no están de moda los monos y además son más incómodos. Y no, ya no están de moda ni los pantalones ajustados acampanados ni las chaquetas tipo bollo comprimido. Chaquetas anchas y con capucha combinando el blanco con otro color, ¡eso sí!
Hemos de tener en cuenta que aunque vayamos con un ofertón como los del IVAJ -con los que encima conoces a jóvenes como tú y te lo pasas genial- en las pistas nos vamos a encontrar con todo el pijerío que caracteriza a este deporte y, aunque con menos presupuesto- hay que saber estar a la altura. No podemos plantearnos comprarnos nada de los diseños de Chanel para la temporada de nieve a precios desorbitados -sí, tiene, y también esquís y botas, que yo los he visto-, pero tampoco podemos recurrir a la típica tienda de segunda mano y coger lo primero que veamos -que normalmente será incombinable-.
Hace unas temporadas Pull&Bear sacó una línea de ropa de nieve y no se ha vuelto a saber de ello pero yo tengo un conjunto muy bonito en azul claro que estaba genial de precio. ¿Y Decathlon? A la moda, de todos los colores, y barato. Simplemente hay que saber elegir y, sobre todo, saber lucirlo y combinarlo. Con unas bonitas gafas de sol el día que no haya ventisca y con complementos para el pelo que no nos conviertan en monstruos. Y si la crema solar y el protector labial no hacen que nuestra cara quede blanquecina y nos aportan un tono de color, pues mejor. Así no les tendremos nada que envidiar a las mil y una niñas ricas que llevan todas el mismo conjunto de Roxy en diferentes colores y que plagan las pistas de motitas (¡será bonito pero aburre!). Así que chicas, ahora que viene el frío, disfrutad de la nieve pero siempre a la moda, ¿eh?
Hemos de tener en cuenta que aunque vayamos con un ofertón como los del IVAJ -con los que encima conoces a jóvenes como tú y te lo pasas genial- en las pistas nos vamos a encontrar con todo el pijerío que caracteriza a este deporte y, aunque con menos presupuesto- hay que saber estar a la altura. No podemos plantearnos comprarnos nada de los diseños de Chanel para la temporada de nieve a precios desorbitados -sí, tiene, y también esquís y botas, que yo los he visto-, pero tampoco podemos recurrir a la típica tienda de segunda mano y coger lo primero que veamos -que normalmente será incombinable-.
Hace unas temporadas Pull&Bear sacó una línea de ropa de nieve y no se ha vuelto a saber de ello pero yo tengo un conjunto muy bonito en azul claro que estaba genial de precio. ¿Y Decathlon? A la moda, de todos los colores, y barato. Simplemente hay que saber elegir y, sobre todo, saber lucirlo y combinarlo. Con unas bonitas gafas de sol el día que no haya ventisca y con complementos para el pelo que no nos conviertan en monstruos. Y si la crema solar y el protector labial no hacen que nuestra cara quede blanquecina y nos aportan un tono de color, pues mejor. Así no les tendremos nada que envidiar a las mil y una niñas ricas que llevan todas el mismo conjunto de Roxy en diferentes colores y que plagan las pistas de motitas (¡será bonito pero aburre!). Así que chicas, ahora que viene el frío, disfrutad de la nieve pero siempre a la moda, ¿eh?
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